Nuevos amigos
¿Estás viajando sola? Me preguntó un caballero con ojos haciendo juego con el color del agua y unas pestañas que podría haber usado de tobogán; interminablemente largas y arqueadas.
Estaba sola en una playa de Tulum, parada mirando el horizonte esperando a que bajara una maquina de pochoclos del cielo para que me acompañara con la película que estaba viviendo. Pero el Universo es mucho más inteligente que el hambre y en cambio me envió a un español de Madrid para que empezara mis vacaciones con el pie en Europa.