El funeral de Alberto
Cuatro porciones de pizza, una bolsa de golosinas y dos horas de notas periodísticas después, me encontré mirando una entrevista sobre un libro supuestamente escrito por Alverso Fernández titulado: “Contengo multitudes”. Atragantada con un hilo de mozzarella de mi cena, cinco minutos después me choqué con el subtítulo: “tengo la necesidad de una sociedad más pobre y primitiva, pero más igualitaria”.
Cualquiera puede publicar un libro, pero ya declarar por escrito cómo se llevó a la Argentina a la quiebra, superó mi desahogo.
Entre Pancho y Fernández he perdido las esperanzas en Argentina hace rato, ya que un país gobernado por un ladrón y un falso profeta dudo de que salga a flote, lo que sí saldrá adelante es mi visualización: Fernández colgado en la Plaza de Mayo por el pueblo.
Alguien tiene que cargárselo, porque por un psicópata de este calibre mueren mil. Es casi el resultado de un algoritmo que desaparezca, la naturaleza no perdona, y estoy segura de que mucha gente quisiera verlo incinerado. Recibir tanta energía negativa nunca te concederá la vida por largo tiempo, y si lo hace, será un calvario.
Cuando terminé invisiblemente de estampar el libro contra la pared, descubrí que era una fake news que corría por las redes, que el presidente nunca publicó esas declaraciones y que algunos programas de humor lo utilizaron como disparador del genocidio que este dictador está causando.
Pero después surgió lo inimaginable, leí otra nota en donde el presidente mencionó la lectura de su carta astral, (recomendada por su secretaria Legal y Técnica de la Nación -y ex pareja- Vilma Ibarra) resumiendo en sus textuales palabras: “ Estoy predestinado a construir desde las cenizas. Si es mi destino, que así sea”. Me supongo que hablaba de las cenizas de todos los incendios, ya que es muy fácil construir un destino en campos desolados. Lo que sí olvidó mencionar en su contrato con el futuro es su relación con la China, que no sabemos bien si exportan virus, cerdos, papel higiénico, máscaras o comunismo. Lo único que tenemos claro es que el presidente de Argentina acaba de fundir el país y su carta natal lo favorece.
Ay Fernández, yo esperaba que te mataran, pero al ritmo que vamos lo vas a hacer solito y sin ayuda. El que te va a terminar ahorcando es tu cinismo, sumado a la vergüenza de prohibir la libre circulación a los ciudadanos que te votaron. El problema de la Astrología es que no te dice la exactitud de los eventos, de lo contrario estaríamos todos preparando el banquete para tu funeral.
Han colapsado todas las empresas y negocios del país y vos estás tirándote las cartas para que te digan cómo seguimos.
Pediste a los empresarios que reduzcan sus salarios y se solidaricen y vos no bajaste el tuyo. Hace siete meses que no puedo viajar a mi país porque cerraste la frontera y tengo que escuchar una estupidez más salir de tu boca humillando mi patria mundialmente. La cuarentena más larga de la historia creada por tu incumplimiento con la transparencia, ¿qué otra payasada querés exponer para ganarte el tiro en la sien?
Te lo estás buscando, vos y todo tu gabinete de corruptos sin educación y moral. Pero el karma no perdona Fernández, y cuando pega la vuelta se duplica, así que aprovechá el subidón ahora, porque cuando bajes de la nube de la soberbia en la que estás metido, te vas a estampar la cara contra una nación que te destripará en vivo hasta ver tu sangre en las paredes que dejaste en la ruina por creerte el papel.
¡Por la libertad!
(El plagio es delito, si vas a compartir mi obra que por favor aparezca mi nombre al final del relato. Gracias).
Ceci Castelli