Barbilandia
Es una pena que me tenga que ir hasta Berlín para pelear por mi libertad, aunque con las fronteras cerradas y el poco entusiasmo que sentí cuando la conocí, dudo de que eso suceda. Supongo que la frase: “no juzgues a un libro por su tapa” fue inspirada en mi visita a la capital de Alemania en 2017. Una ciudad que no me movilizó ni un pelo cuando la conocí, pero que ahora pasó a ser un potencial de retiro jubilatorio.
Señores, esta gente ya está canchera con el nazismo, nosotros recién empezamos. Hoy, primero de agosto, las calles de Berlín explotaban con ciudadanos protestando por la libertad y reclamando sus derechos constitucionales. Y en mi barrio mi vecina me retiró el saludo porque no llevaba un bozal puesto. Lo que esta chica no sabe es que portar un arma en Estados Unidos es legal, y que si yo fuera de Texas probablemente ya la hubiera liquidado. Pero me crié tirando bombuchas por el balcón cuando alguien me caía mal, no voy a pelar un 38 a mis cuarenta años. Aparte no puedo amenazar a alguien que ya se está matando solita con su propio dióxido de carbono. Puede que esto también sea parte de la agenda de los globalistas: que en los próximos ocho meses se mueran un par por usar mascarillas.
Habrá que habilitar más cementerios, porque con California solita nomás ya reventamos las parcelas.
La cosa se va poner bien chunga cuando los Rednecks se harten de el circo de Black Lives Matter, la vacuna obligatoria, el lobby LGTB y salgan a reclamar que América es de ellos. Hablame de balacera y de desfinanciar a la policía ahí. Un kilombo importante sin una constitución vigente porque la perdimos por una gripe a la que sobrevive el 99% de la población. Pero tranqui, todavía hay esperanza ya que para las próximas elecciones tenemos un candidato pedófilo con alzheimer’s.
Hay tantos videos de Joe acariciando desagradablemente a menores de edad, que no me queda otra que juzgar al poder de enfermos crónicos.
¿Estaré enfilándome para el anarquismo? ¿Quién puede discutirme qué no es una mejor opción cuándo los políticos gobiernan solo para ellos?
¿Alguien puede decirme quién fue un buen gobierno sin hacer diez cosas bien y tres mal? y esas “mal” obviamente que siempre incluían la alimentación o la medicina o la educación.
Aún así, me vale madre porque la responsabilidad de vivir coherentemente es mía, no del gobierno de turno. Lo que me supera ampliamente es la idiotez de los vecinos o el que no está de acuerdo con mi libertad imponiéndome su forma de pensar. Tal vez este año debería llamarse: 2020, el año sin inteligencia emocional.
Como se fue todo al tacho en un par de meses, pensar que hasta hace poco me quejaba del mal aliento de mis citas y ahora estoy batallando para verles la mitad de la cara sin estamparlos contra la pared clavándoles un punzón en la sien y dejando mi firma debajo. Violencia no, justicia.
Algunos merecen morir, pero son tantos que no debe haber lugar en el cielo para albergarlos. Si me cruzo con uno más que no sepa quién fundó las organizaciones LGTB, la que va a salir a poner las vacunas con mercurio soy yo. Se reciben en Harvard y no saben quién es el 1%. Porque no agarran el diploma y se hacen un churro con vitamina C y me dejan de joder con las peleas callejeras de la democracia. La democracia es el lavaje cerebral que te hicieron en la universidad sacándote el pensamiento crítico para llevarte a la esclavitud. Y vos como buen soldado obediente te colgaste la bandera de la igualdad y con esto te pensas que sos abierto de mente. No sé si llorar o mudarme a Marte; tal vez Marte no sea una buena opción ya que a lo mejor me lo encuentre a Elon Musk implantado microchips a marcianos de la tercera edad.
Lo único positivo de todo esto es que si los globalistas activan las ondas Haarp, de seguro que en esta región me salvo. Silicon Valley: te debo una, aunque vos le debes al mundo una extension de cuatro mil años.
No hay mal que por bien no venga, me decía mi abuela, y yo siempre le contestaba lo mismo: prefiero ningún mal y que nadie venga.
¿Qué dicen gauchos? ¿Me lleva un sismo o un tsunami?
Mientras no me lleve estupidez humana puedo surfear cualquier desastre natural, eso sí, con el rosario en la mano rezando bolita por bolita para no cruzarme con un barbijo más en el medio de la catástrofe.
Namasté!
(El plagio es delito, si vas a compartir mi obra que por favor aparezca mi nombre al final del relato. Gracias).
Ceci Castelli