Nanoidiotas a la carga
Lo bueno de vivir en un estado como Florida es que se destaca el nativo del turista. Embozalados: turista, bandera norteamericana flameando de la camioneta: nativo; gorro de Trump con pistola en la cintura: nativo, alcohol en gel colgando de la mochila: turista.
Lo sobrenatural de habitar un sitio como este es que el 80% es como yo: libre. No como en California que a partir del 15 de julio (vacunados incluidos) deben usar bozales obligatoriamente dentro de cualquier establecimiento. Merecen la cámara de gas, si me piden de activar la palanca trabajo como voluntaria.
¿Alguien puede imaginar el futuro de esta gente? ¿Con bozal y vacunados?
O sea viviendo la vida con normalidad como si estar lleno de metales y con la boca tapada fuera de egresado de Harvard. Perdón, lo son. Sinceramente me dan mucha pena las mascotas de estos borregos, ¿se imaginan al perro enterrando al dueño? No me sorprendería, estamos a la vuelta de la esquina de zombies cayendo de hocico en los supermercados, sufriendo trombosis pulmonar después de la segunda dosis. Por todos estos idiotas yo tengo que seguir escuchando más variantes de por vida, en vez de una buena banda en vivo. Ya que no solo han matado al pensamiento crítico, sino también al arte que hacía que “ser humano” no fuera una carga tan pesada.
Ahora llevaremos una mala reputación de por vida, y mis hermanos los extraterrestres no se acercaran al Uritorco ni de coña. Si de la estratosfera nomás se verá el sembrado de nanotecnología implantado en el ADN como florcitas de un futuro desgarrador.
Ay abuelita, qué bien hiciste en partir, pensar que tu último problema fue la inflación. Ahora el sistema económico se dio cuenta que para controlarnos debe existir de por vida.
Y por culpa de los malditos esclavos durmientes tengo que falsificar 90 certificados para visitar a mi familia. Por suerte Cuba me apoya, una pena que tuvieron que llegar a la pobreza y a la decadencia absoluta para salir a la calle.
Hijos del rigor, welcome tu planet Earth!
Ayer hablando con mi amiga Jamie Lynn decíamos que hace 2 años que no viajamos a Europa, pero sinceramente no puedo imaginarme en la ciudad de Brujas (Bélgica) rodeada de gente con bozal. Mostrando que estoy vacunada para poder entrar a un museo.
¿Por qué tengo que justificar todas las estupideces que proponen?
Para eso cruzo la calle y me voy a la playa a escuchar el sonido de la libertad.
—Este es el mundo que se viene Ceci, ¿vamos a dejar de viajar por esto? Me dijo Jamie bajo los efectos de la nostalgia.
—Mirá, no sé, de repente las playas de Florida son la nueva normalidad, gente confiando en su salud y tomando una cerveza con amigos.
—Pero Ceci, nos faltan muchos países por recorrer, esto es lo que más amamos: viajar.
—Mirá Jamie, yo también amaba San Francisco, y ahora está enterrada en el cementerio junto a mis ex novios. Soy una tipa comprometida hasta el final, pero con la mediocridad no llego ni al check-in.
—No entiendo cuál es el problema si tenés certificados truchos hasta del tétano—me dijo ella indignada.
—¿Sabés cuál es el verdadero problema? ¡Que no me da la gana de cruzarme a los zombies en mis vacaciones! ¿Hasta cuándo? Encima tengo que pagar para verlos con la polaroid, el bozal, la mirada infartada y que se yo que otra paranoia en esteroides.
Aparte si no es otro virus es alguna pseudo catástrofe climática, la segunda muletilla de exterminio.
Entiendo que sin viajar nos falta algo, pero no estamos como para que activen las ondas HAARP mientras nos tomamos un submarino en Grecia.
Antes de que me dinamiten necesito ponerme de novia, mi familia jamás me lo perdonaría.
—Ceci, está más difícil encontrar una persona comprometida que encontrar a los responsables de la caída de las Torres Gemelas.
—No toquemos el tema que está delicado, el de la pareja digo, el de las Torres Gemelas ya sabemos que el gobierno de Bush tramaba un plan siniestro.
Y así cerramos la noche, Jamie Lynn sacándose un pasaje para venir a verme en septiembre. Seguramente para debatir si alquilamos un bote en los canales de Brujas o si trucamos la tercera dosis con un certificado cinco estrellas de chupamedias de un sistema roto y obsoleto.
Wish me luck! Nunca fui de llevarme bien con las autoridades…
¡Buen viernes para todos!
Ceci Castelli